sábado, 2 de junio de 2012

¿Descendientes de los atlantes?

“Todo lo que sabes acerca de ascendencia británica e irlandesa está mal. Nuestros antepasados fueron los vascos, no celtas. Los celtas no fueron exterminados por los anglosajones, de hecho no tenía mucho impacto en el patrimonio genético de estas islas. “(Oppenheimer, 2007)

Una declaración sorprendente hecha por el Dr. Stephen Oppenheimer, profesor de genética en la Universidad de Oxford, que sopla la tapa de los principales mitos históricos y lingüísticos sobre los orígenes de los antiguos habitantes de las Islas Británicas. En el proceso el profesor Oppenheimer también ha abierto otra “caja de Pandora” -errores cometidos por los historiadores profesionales, lingüistas y arqueólogos sobre el asiento del pueblo celta, un error aún perpetuado hasta nuestros días.

La escultura Antigua de la Península Ibérica conocida como la Dama de Elche (aka Dama de Elx). La leyenda popular dice que la escultura se encontró el 4 de agosto de 1897, por un joven trabajador, Manuel Campello Esclapez. Esta versión de la historia difiere del informe oficial de Pere Ibarra (el guardián de los registros locales), que dice que fue Antonio Maciá quien encontró esta obra ya famosa de arte. El descubrimiento inicial de la Dama de Elche provocó un interés popular en la pre-romana cultura ibérica. En la actualidad reside en el Museo Arqueológico Nacional en Madrid, España. Los lugareños la llaman “La sacerdotisa de la Atlántida de España”.

Lo que sigue es tomado de un artículo escrito por el profesor Oppenheimer para Prospect Magazine (2006). En ella el autor señala cómo los arqueólogos modernos, linguistas e historiadores han trabajado durante décadas en una premisa falsa, presentada por un solo error hecho por el antiguo historiador Heródoto.

¿QUIENES FUERON LOS BRETONES?

El profesor Stephen Oppenheimer tiene algunas cosas importantes que decir en lo que respecta al origen de los bretones, es decir, cómo se derivan los británicos “de la Edad de Hielo en los paises Vascos”. Las personas interesadas se les insta a leer su presentación completa en Prospect Magazine (por desgracia no se encuentra disponible en línea). Vamos a tomar la “caja de Pandora” que menciona en un momento.

“La evidencia genética indica que tres cuartas partes de nuestros antepasados vinieron a este rincón de Europa como cazadores-recolectores, alrededor de 15,000 y 7,500 años, después del derretimiento de los casquetes de hielo, pero antes de que la tierra se separara del continente y se dividiera en las islas. Nuestra separación posterior de Europa ha conservado una cápsula del tiempo genética del suroeste de Europa durante la edad de hielo, la cual compartimos más de cerca con el antiguo refugio de la edad-hielo en el País Vasco. Los primeros pobladores era poco probable que hablan una lengua celta, sino una lengua relacionada con la única lengua vasca.” (Oppenheimer, 2006)

Durante décadas se creyó que los celtas fueron los primeros habitantes de las Islas Británicas, pero eso fue antes de que arqueólogos hicieran los descubrimientos ya famoso en Swanscombe Alto (Howells, 1959) y posteriormente los de los Cro-Magnon conocidos como Aziliense. El arqueólogo Frank Hibben escribe;

“En el periodo Mesolítico las islas británicas recibieron tres razas de migración. . . En el norte, los Maglemoseans... Desde el este los Tardenoisians... En el sureste, los Azilians, los cuales también cruzaron a las costas británicas del sur de Francia. El Aziliense aparentemente se disperso desde el suroeste de Inglaterra a Escocia.” (Hibben, 1958)

Esto está en acuerdo con los últimos hallazgos genéticos que sugieren que la gente que ahora habitan las islas británicas (incluido el irlandés, galés, escocés, vascos y bretones) son un remanente de los grupos de personas que “salieron de España entre 18,000 y 12,000 años atras, y pasaron 6,000 años aislados de Europa antes de regresar, trayendo la cultura megalítica a la costa de Europa.” (reciente entrevista con el Dr. NOVA Dennis Stanford y el Dr. Bruce Bradley del Museo Smithsonian de Historia Natural)

De acuerdo a una entrevista de la BBC (3 de abril de 2001), los genetistas de la Universidad College de Londres informaron de una conexión genética entre los celtas de las Islas Británicas y los vascos del norte de España. El estudio, realizado por el profesor David Goldstein y James Wilson (junto con sus colegas de la Universidad de Oxford y la Universidad de California), establecieron que el galés y los irlandeses son “hermanos genéticos de sangre” de los vascos en el suroeste de Europa. Desde entonces los estudios genéticos están demostrando un vínculo genético que se remonta “a decenas de miles de años” entre celtas y vascos.

“Los resultados proporcionan la primera evidencia directa de una relación estrecha entre la gente conocida como los celtas y los vascos. Los patrones genéticos de las tres razas transmitidas a través de la línea masculina son todos muy similares, los investigadores concluyeron. Los vascos pueden rastrear sus raíces las cuales remontan a la Edad de Piedra y son unas de las personas más distintas de Europa, muy orgullosos de su ascendencia y tradiciones.” (Entrevista NOVA)

Otros estudios genéticos muestran que los celtas, los vascos, y los bereberes son todos relacionados. Pero desde que la Atlántida no es una parte del moderno pensamiento-proceso antropológico, estos están acusados de haber “salido de España” (o algunos dicen que “salieron de Francia”) para las Islas Británicas, donde quedaron aislado de Europa con el aumento de los niveles del mar al final de la Edad de Hielo. (Esta línea de pensamiento asume falsamente que el hombre de la Edad de Hielo tampoco poseía la tecnología náutica o la experiencia hace 15.000 años.)

UNA GEOGRÁFICA “CAJA DE PANDORA”

Así que ahora, qué con la “caja de Pandora” abierta por el descubrimiento del Prof. Oppenheimer de que los celtas de los autores clásicos para nada se originaron en el centro de Europa, estos se cituaron en las regiones de la Galia e Iberia (Francia, España y Portugal) . Por generaciones los historiadores, lingüistas y etnólogos han escrito, hablado y enseñado acerca de los braquicéfalos, los fornidos “celtas” pisando fuerte alrededor del centro de Europa.

Creo que el profesor Oppenheimer ha descubierto un error grave etnográfico perpetuado por los escolares durante siglos, debido a un error en particular hecho por el antiguo historiador Heródoto. Este error condujo a nuestros eruditos modernos a el supuesto origen de los tan llamados “celtas” en Europa Central, y hasta hace poco nadie (historiador, lingüista, etnólogo, arqueólogo ni antropólogo) ha tenido la previsión de cuestionarlo. Esto fue, hasta Oppenheimer, quien fue llevado al descubrimiento por la genética. Él escribe:

“No hay absolutamente ninguna evidencia, lingüística, arqueológica y genética, que identifique las regiones o culturas Hallstatt o La Tène, como lugares de origen celta. La noción se deriva de un error cometido por el historiador Heródoto hace 2,500 años, cuando, en un comentario sobre los “Celtas”, este los colocó en la fuente del Danubio, el cual pensó que estaba cerca de los Pirineos. Todo lo demás acerca de su descripción coloca a los celtas en la región de Iberia.” (Oppenheimer, 2006)

No sólo los escolares del siglo decimonoveno cometieron este disparate al no tomar la totalidad de la declaración de Herodoto en cuenta, sino que alimentaron el fiasco al no hacer caso omiso de todos los otros escritores antiguos, como Livio, Plutarco, Estrabón, Polibio, Pausanias, Aristóteles, Plinio y Avieno, todos los cuales consistentemente colocaron a los celtas en la porción más occidental de Europa junto con los vascos, aquitanos, iberos y lusitanos.


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1 comentario:

  1. El gen R1B indica el aprentesco de todas las poblaciones de Europa Occidental, este gen es mayoritario en Francia UK España y Portugal

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